TERESA WILMS MONTT
(1893 – 1921)
Teresa Wilms Montt desatendió la hipocresía imperante. En su breve pasar, dejó una
marca indeleble: su poesía. Fue elogiada por los intelectuales de la época, entre ellos,
Valle Inclán y el más entusiasta con su obra fue sin duda, Juan Ramón Jimenez en una extensa carta fechada en 1944...
Una vida torturada por una época llena de artificiales conceptos. Rompió esos moldes que parecían eternos, dejó atrás la maraña de comentarios y chismes, hizo lo que su alma le indicaba, dejando de lado carretas inservibles y agusanados conceptos morales.
Hastiada, tomó al final el sendero de las sombras...
NUEVE ESPEJOS
VIII
Liverpool, Hotel Adhelfi, octubre 16, 1919, 372 madrugada.
No he podido dormir. A la una de la madrugada
cuando iba a entregarme al sueño,
me di cuenta que estaba de espejos.
Encendí la lámpara y los conté. Son nueve.
Recogida, haciéndome pequeña contra el lado de la pared
traté de desaparecer la enorme cama.
Llueve afuera y por la chimenea caen gruesas gotas, negras
de tizne. ¿Es que se deshace la noche?
No tengo miedo, hace mucho tiempo que no experimento
esa sensación.
Me impone el viento que hace piruetas silbando,
colgado de las ventanas.
No podría explicarlo, pero aquí, en este momento,
hay alguien que no veo y que respira en mi propio pecho.
¿Qué es eso?
Bajo, muy bajo, me digo aquello que hiela
pero que no debo estampar en estas páginas.
La sombra tiene un oído con un tubo largo, que lleva
mensajes a través de la eternidad.
Y ese oído me ausculta ahí, tras el noveno espejo...
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